Doce de octubre, diluvia
¡qué tristeza tiene el día
y que honda melancolía
la calle bajo la lluvia!
Recostada en el balcón
pensando en lo que yo sé
encuentro no se por qué
una estrecha relación
entre la tarde otoñal
y mis esperanzas rotas
al mirar como ls gotas
resbalan por el cristal.
Llueve con tal dulce son
con un murmullo tan leve
que me parece que llueve
dentro de mi corazón
P.Mata